Mientras en el Palacio de las Convenciones de La Habana se celebraba el octavo congreso del partido comunista de Cuba, en el que el presidente Miguel Díaz-Canel relevó a Raúl Castro en el cargo más importante del país, primer secretario del partido, la sede del Movimiento San Isidro, que es el domicilio del artista Luis Manuel Otero Alcántara, fue asaltada. Varios agentes de la Seguridad del Estado vestidos de civil entraron a la casa y se llevaron por la fuerza en patrullas policiales a Otero Alcántara y a la poeta Afrika Reina. Afuera de la vivienda, para justificar ante el barrio la arbitrariedad, los agentes gritaron: “¡Qué viva la revolución! ¡Qué viva Fidel! ¡Qué viva el partido! ¡Abajo la gusanera!”. De la vivienda, los agentes se marcharon con las obras recientes de Otero.